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dimecres, 18 de març del 2009

Let there be light

24 de Diciembre, 1968. El Apolo 8 se convierte en la primera misión tripulada que orbita la Luna. Los tripulantes protagonizan una emisión de televisión en directo desde nuestro satélite. Los viajes al espacio, algo tan "normal" ahora, impresionaban a la población y coronarse campeón en la carrera espacial era algo vital.

Los tres astrounautas del Apolo 8: el Comandante Frank Borman, Jim Lovell y William Anders se turnaron al final de la transmisión para dedicar unas palabras a la audiencia. En una noche tan señalada, tres americanos no podían elegir otro libro que no fuera la Bíblia. Y así, William Anders comenzó la dedicatoria:

For all the people on Earth the crew of Apollo 8 has a message we would like to send you.

In the beginning God created the heaven and the earth. And the earth was without form, and void; and darkness was upon the face of the deep. And the Spirit of God moved upon the face of the waters. And God said, Let there be light: and there was light. And God saw the light, that it was good: and God divided the light from the darkness.

Texto completo, grabaciones originales...(NASA.gov)

Esa Nochebuena, los Estados Unidos dieron el segundo gran paso de la Humanidad en el espacio: orbitar la Luna con una nave tripulada, y hacerla volver. Al año siguiente, darían el tercer y más famoso paso: colocar a un hombre en la Luna, y traerlo de vuelta.

La primera vez que oí las palabras de William Anders fue, sin saberlo, al escuchar "In the beginning", la canción introductoria del fabuloso álbum "The Songs of Distant Earth" de Mike Oldfield. Sin entrar a debatir el sentido religioso de esas palabras, o del libro del que provienen...la verdad es que, al menos a mí, me hacen pensar en muchas cosas. Oír la voz de William Anders, y la de sus compañeros, e imaginar dónde estaban en ese momento...Solos, a millones de kilómetros del resto de los humanos, observando otro mundo muy diferente al nuestro...es sencillamente abrumador.

Muchas veces olvidamos lo lejos que hemos llegado y sólo somos capaces de ver lo que tenemos alrededor. Ya no importa quién llegó primero, o quién hizo qué antes... Lo que importa es que esos hombres vivieron algo que muy pocas personas han podido vivir, algo que muchas jamás vivirán, y algo que con suerte puede que algunos vivamos algún día. Algo que es muy importante, algo histórico. Algo que será recordado como nosotros recordamos otros eventos como el descubrimiento de América. En un mundo en que los logros científicos parece que ya no importan para nada porque somos incapaces de ver más allá de nosotros mismos...puede que sea un buen momento para empezar a repartir mejor el dinero público.



Me gustaría dedicarle este pequeño espacio a todas esas personas que han trabajo y han arriesgado y sacrificado sus vidas en misiones como ésta. Y a todas las que lo harán en el futuro. Hay que seguir investigando, lo mejor está por venir.

Wu Ying Ren